Entrevista a Domingo Kong, jefe de Finanzas y profesor por hora de la Facultad Tecnológica

El profesor y jefe de finanzas de esta Unidad Mayor conversa sobre su paso por la Facultad, intereses personales y ciclos de vida.

Camina pausado por los pasillos de la Facultad Tecnológica, su lugar de trabajo hace más de 40 años, 44 para ser exactos, “desde el 12 de diciembre de 1973”, específica Kong. Santiaguino de nacimiento, sus padres vinieron desde el norte de Chile, Iquique precisamente, y sus abuelos desde China.

Domingo Kong Lao recuerda su infancia en Santiago Centro, comuna en la que nació, y la historia de sus padres que vinieron desde el norte a Santiago, donde finalmente se establecieron.

“Uno con la edad, viejo ya, empieza a cerrar círculos. Yo no conocía donde había nacido mi papá, que fue en Huara. Por lo tanto, hace unos dos o tres años me fui a conocer todo ese sector, donde estuvo mi papá y mi abuela. Conocí todos esos lugares y fue una emoción muy grande, porque siempre, a pesar de que yo soy santiaguino, cada vez que veía televisión y mostraban algo del norte me emocionaba y no entendía el porqué. Sentía algo especial. Con eso cerré el primer círculo”, comenta Domingo.

Para el docente la historia familiar que uno carga forma parte clave de una persona, de sus orígenes. En este sentido y consultado por el origen de sus abuelos chinos, cuenta que ese fue el segundo círculo que tuvo que cerrar. Sin saber mucho sobre su abuelo, explica cómo surgió el siguiente viaje que haría.

“Lo único que sé es que mi padre una vez –se ríe- cuando me casé me regaló una manta, bonita, pero que con el tiempo mi señora empezó a usar en la tabla de planchar ¡y la quemó! Un día mi papá fue a la casa, la vio y me dijo “pero hijo, si esa manta era de tu abuelo, y la trajo de Cuba más encima”, cuenta entre risas.

Explica que sus abuelos habrían llegado primero a Los Ángeles en Estados Unidos, y luego habrían llegado a Cuba, y de Cuba al norte de Chile.

“Por lo tanto ese era otro círculo que cerrar. Así que partimos a Cuba con mi señora, estuvimos en el barrio Chino, donde imagino tuvo que haber estado mi abuelo y también fue significativo”, señala.

Padre de tres hijos, desde siempre ha sido fan de The Beatles, gusto musical que transmitió a sus tres hijos, y que se vincula con el último ciclo que espera cerrar: viajar a la cuna de la icónica banda inglesa, Liverpool.

“Han ido todos, menos yo por asuntos de trabajo, y es que generalmente el verano empieza a llegar por el mes de julio, agosto, y no puedo ir en esa fecha porque estoy trabajando. Por lo tanto estoy esperando una vez que jubile poder hacer ese viaje. Con eso quedo tranquilo”, menciona.

Vínculo con la Faculta Tecnológica

Con 44 años en la Universidad, cuenta que llegó a trabajar en la Tesorería de la Universidad, donde se mantuvo por tres años para luego presentarse en un concurso y optar el cargo de jefe de finanzas de la entonces Escuela Tecnológica, ubicada en Recoleta: “En junio de 1976 me fui a la Escuela Tecnológica como jefe de finanzas y así hasta esta fecha. Llevo todo mi vida en la Facultad”, menciona.

De profesión Contador General, comenta que la Universidad le brindó todas las posibilidades para poder continuar sus estudios. Cursó Técnico Universitario en Administración de Personal, luego Tecnólogo en Administración de Personal y la Licenciatura en Organización y Gestión Tecnológica.

“Además de esos estudios, realicé algunos diplomados y cursos, que me han ayudado mucho para poder hacer clases, que es lo otro que me gusta”, señala.

Respecto a su faceta de docente, lleva más de 20 años haciendo clases, actualmente en la carrera de Tecnólogo en Administración de Personal, y señala que a pesar de las largas jornadas laborales, no siente el peso del cansancio debido a lo mucho que le gusta enseñar.

“Me siento feliz, porque justamente lo que hago en mi función administrativa, que es toda la parte presupuestaria, me llena. Me gusta, no me siento agobiado con mi trabajo. Y ser profesor por hora es otra actividad que me encanta. Yo salgo, por ejemplo, de clases a las 22:30 hrs de la noche, y salgo contento, feliz. Me motiva hacer clases”, destaca.

En cuanto cómo ha sido trabajar todos estos años en la Facultad Tecnológica, no duda en afirmar que ha sido una de las mejores decisiones que ha tomado, destacando no sólo las posibilidades que entrega la Universidad, sino también el ambiente laboral que se gesta entre las distintas unidades.

“Uno llega a querer a la Universidad, sobre todo a esta Facultad, donde las relaciones humanas que se dan no se dan en otras Facultades. Yo creo que tiene esa característica, que acoge bien. Aquí uno no ve mayores diferencias con los académicos, la relación es súper cercana”, menciona.

Asimismo, enfatiza en los avances que ha tenido esta Unidad Mayor en cuanto al desarrollo académico, destacando el mayor número de carreras que se imparten actualmente, los postgrados, diplomados y programas de Magíster y Doctorado.

Finalmente, cuenta que la Universidad ha retribuido el esfuerzo realizado durante estos años, y que espera que quienes lleguen a integrarse a la Facultad se sientan de la misma forma: “Espero que las nuevas generaciones que vengan se sientan contentos y felices, como yo me he sentido por estos años en la Universidad, y principalmente en mi Facultad”, finaliza.

Por Estefanía Ibaceta González