Director del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos destaca programa gubernamental “Del Mar a Mi Mesa”

El director del Departamento Ciencia y Tecnología de los Alimentos de nuestro Plantel, Dr. Francisco Rodríguez Mercado, afirma que junto con impulsar la preparación y formatos de recetas enfocadas en los niños, el fomento de esta nueva dieta permitirá contribuir a prevenir enfermedades cardiovasculares, bajar los índices de obesidad y dinamizar, aún más, la industria alimentaria.

La Subsecretaría de Pesca lanzó esta semana el programa ‘Del Mar a Mi Mesa’, iniciativa que busca generar, este año, una estrategia nacional para aumentar el consumo de productos marinos entre la población.

Al respecto, el Director del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Francisco Rodríguez Mercado, evalúa positivamente la iniciativa, en particular debido a que los productos del mar “aportan beneficios nutricionales muy relevantes para la población y pueden contribuir a prevenir enfermedades cardiovasculares y la obesidad”.

Junto con remarcar que la medida abre la posibilidad de ampliar la oferta gastronómica con nuevos productos que contengan este tipo de materia prima alimentaria, prevé un aumento en el consumo entre los niños, quienes muchas veces rehúyen los productos marinos. “Si a un niño le ofreces una presa de pescado frito normal, lo más probable es que lo rechace, pero si en el plato observa pequeñas porciones nugget, probablemente las aceptará con gusto y evidenciará una mayor disposición al consumo”, afirma.

Según datos de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura actualmente se registra un consumo promedio aproximado de 13 kilogramos (kg) de pescado por persona al año, muy por debajo de los 20 kg recomendados.

Desafíos

El Dr. Rodríguez indica que uno de los desafíos de la elaboración de los productos marinos es la extensión de su vida útil, ya que deben consumirse frescos. A excepción de ciudades como Arica, Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, o Puerto Montt, hay muchos polos urbanos del país que se encuentran emplazados en sectores alejados de las costas, lo cual genera “complicaciones para mantener la cadena de frío”.

Para resolver tal problema, el director considera como una tarea crucial que las empresas incorporen nuevas tecnologías que permitan mejorar la calidad de los alimentos envasados. “No solo contribuirá a las exportaciones, sino también a la distribución en nuestro país”. Este nuevo programa Del Mar a Mi Mesa, implica –a su juicio- claramente un nuevo reto para la industria y el comercio alimentario, en general.

Por último, el académico destaca el importante rol que podrían desempeñar las universidades y los centros de investigación (como el de la U. de Santiago), que han desarrollado modernas tecnologías que permiten prolongar la vida útil de los alimentos. “En nuestros laboratorios, se diseñó un envase antimicrobiano para extender en dos días la vida útil de un producto fresco, lo que representa un 15 o 20% más que lo normal. Esto tiene un impacto económico muy fuerte”, sostiene.

 

Fuente: Usachaldía